Julio 2008.
No tienen ni idea de las ideas que se imponen en Europa los inmigrantes que arriesgan todo para llegar a esta parte del mundo, desde donde sí les ha llegado que el hambre y la miseria no son los determinantes agónicos que se tragan la vida. Arriesgan a que todo se lo trague una ola. Siguen acudiendo en el balanceo marino para que se cumpla el tétrico rito, y es tanto el miedo, que Saturno no puede dejar de devorarlos....
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